02 - Minotaur (6:22)
03 - Playwright (7:55)
04 - Falling Kind (5:59)
05 - Drifter (6:23)
06 - Cloud Symmetry (5:22)
07 - Until We Witness It (7:46)
08 - Come To Pass (8:26)
09 - Sun Below (3:45)
Por segunda semana consecutiva nos quedamos en Helsinki, la capital de Finlandia. Los orígenes de The Chant, nuestros protagonistas de hoy, los encontramos en 1999 y desde ese año hasta 2008 se han dedicado a completar la formación y perfeccionar su metal atmosférico y con matices progresivos. Precisamente en 2008 editan su primer disco Ghostlines a los que siguen This Is The World We Know en 2010, A Healing Place en 2012 y New Haven este mismo año.
Ilpo Paasela - Voz
Jussi Hämäläinen (Hanging Garden) - Guitarra y voces secundarias
Pekka Loponen - Guitarra y voces secundarias
Kimmo Tukiainen - Guitarra
Markus Forsström - Bajo
Roope Sivén - Batería
Mari Jämbäck - Teclados
Lo que más llamativo resulta del sonido del grupo es para tener tres guitarristas en la formación éstos no están para añadir más cuerpo a los riffs sino para jugar más con las texturas, agasajándonos tanto con curiosos juegos instrumentales como con sentidas melodías vocales y eso queda muy patente tanto en temas más rockeros como Earthen como es piezas de la sutileza de Minotaur (de la que han hecho un videoclip muy original). Ya desde el disco anterior podemos hablar de que The Chant han conseguido un sonido propio pese a moverse en las mismas coordinadas sónicas que Katatonia, Anathema e incluso formaciones de post-rock. Aunque Ilpo Paasela es el vocalista titular dos de los guitarristas le ayudan también a hacer voces dobladas, coros e incluso cánones y uno de los temas en los que más se aprecia esta característica es en la preciosista Playwright, llena de cambios y de detalles que se ensamblan con una naturalidad pasmosa. Falling Kind es uno de los cortes que el grupo (y el sello, claro) publicó como adelanto del disco, decisión que aplaudo encarecidamente porque a pesar de respetar el sonido del grupo es de lo más pegadizo que han hecho nunca, demostrando que un grupo con un sonido marcado se puede permitir ciertas licencias sin sacrificar ninguna de sus bondades. Drifter es una preciosidad en formato acústico que deja claro que The Chant siempre han tenido muy buena mano para los cortes lentos y atmosféricos mientras que Cloud Symmetry, aún partiendo de los derroteros del tema anterior, tiene unos ritmos más potentes y compactos que le dan más empaque a la canción. Esta última parte del disco está conformada por dos temas muy introspectivos: Until We Witness It se basa en una oscilante estructura que parece arrastrarnos a su merced mientras no nos damos ni cuenta de lo que está sucediendo, en cambio Come To Pass, el segundo tema (y el más largo de todo el álbum)que nos adelantaron del disco, tiene en una agradable monotonía su mejor baza. El disco cuenta con Sun Below como bonus, una pieza que no llega a cuatro minutos pero que atesora también mucha calidad y se encarga de cerrar el disco con broche de oro.
Somewhere in the corner
Only you can
Enter inside
Who carried you there
And locked you in
Your little bones are
Sticking through your skin
The hawthorne yearns
Random drops of blood
On this path shadows spread
Just above the ground
The winter freezes
My trail on the snowbed
The animals can come
And drink from my footsteps
It took me years to find
The entrance to the labyrinth
All of these lifetimes
You have been hidden from me
I can turn around and find
My way out of the labyrinth
All of these little lifetimes
The snow has been falling on your trail
Is there a man behind you?
Someone breathing right behind you
Is there a man behind you?
A monster breathing, chasing after you
Come to pass
The imaginary being
Invisible and cold, just a ghost
Raised a hand on my cheek
I cracked open like a shell
The imaginary being
Left me standing still and alone
With an ache inside of me
I know I can never let go
In the place where branches of dream
Still reach over to reality
I will wait for you
